A pocas horas de la fecha apocalíptica Maya que indica que afrontaremos el fin del mundo, 21 de diciembre del 2012, ya hay quienes se han atrincherado en bunkers, algunos de ellos muy modestos, otros reales mansiones, los hay quienes se reunirán en montes a esperar el momento, la cuestión es que lo que si realmente ha causado esa fecha son ríos de tinta de escritos al respecto, dinero a quienes han comercializado con los sentimientos fatídicos, y una histeria casi colectiva en algunos que no acatan razones, donde incluso hasta la NASA ha tenido que intervenir, pues ellos en sus instrumentos de avanzada, no visualizan ninguna catástrofe física que venga hacia nuestro planeta.
La catástrofe la veo yo en las mentes de quienes juran que si sucederá, de ahí que leemos sobre suicidios masivos y más cosas que se planean para ese día, pues los asusta que se habla de que se producirá una configuración planetaria única que desencadenarán una cadena de catástrofes, el impacto de un asteroide sobre la tierra, de un supuesto choque de planetas, de una tormenta solar, todo esto ha dado mucho que hablar en redes sociales, en períodicos, diarios, libros y otros medios, pero repito, la NASA no tiene constancia física de nada que se acerque a la Tierra, aseguran que no pasará nada, el campo magnético se mantiene estable, no se visualizan objetos extraños en el cielo, la actividad sísmica es la habitual y que el comportamiento del Sol es normal.
Hasta los Mayas que sobreviven hoy nos indican que se ha dado una mala interpretación de este calendario Maya que se creó hace 5.125 años, un día que es coincidente con el 11 de agosto del 3.114 antes de Cristo y cuyo ciclo termina precisamente el 21 de diciembre de 2012, que cae en el solsticio de invierno.
No es el fin del mundo!, nos encontraremos aquí el 22 de diciembre, con el amanecer de una fresca teoría que habla del comienzo de una nueva era de luz y armonía, que esto si sea una profecía y lo que signifique es que se acaben las guerras, las hambres, que todos nos veamos como hermanos, que al fin nos demos cuenta que somos una misma especie... seres humanos y dejemos de destruirnos entre nosotros mismos y que utilicemos nuestros recursos para ayudar a quienes menos pueden, "no dándoles el pescado, sino... enseñándoles a pescar".
Feliz Nueva Era!!!
Otros temas de interés:
